REAL DECRETO 637/2021 Y BIOSEGURIDAD
LAS CONSECUENCIAS QUE TIENE LA ENTRADA EN VIGOR DE ESTE RD RESPECTO A LA BIOSEGURIDAD
Las principales novedades que recoge el Real Decreto 637/2021, de 27 de julio, por el que se establecen las normas básicas de ordenación de las granjas avícolas se articulan en torno a dos grandes áreas: reforzar los requisitos en materia de sanidad animal y bioseguridad de las granjas, con el fin de mantener un estatus sanitario adecuado en las mismas, y adoptar compromisos en materia de medio ambiente, relacionados con la protección del agua, el aire, los suelos y la lucha contra el cambio climático.
Esta normativa entró en vigor el 22 de julio de 2021, pero se establecen algunos periodos transitorios importantes. En relación a los requisitos de bioseguridad para las explotaciones ya existentes entrarán en vigor el 1 de enero de 2024.
¿A qué nos referimos cuando empleamos el término BIOSEGURIDAD? Bioseguridad se define como el conjunto de medidas de prevención por excelencia que abarcan, tanto las estructuras de la explotación, como aquellos aspectos del manejo y gestión, orientados a proteger a los animales de la entrada y difusión de enfermedades infectocontagiosas y parasitarias en las explotaciones.
La bioseguridad en las granjas avícolas es imprescindible si se quieren prevenir enfermedades y zoonosis, así como conseguir buenas producciones y proveer a las aves de un excelente bienestar. Es por ello por lo que las medidas de bioseguridad utilizadas de forma óptima son una herramienta fundamental para prevenir la propagación de enfermedades y salvaguardar las explotaciones de manera competitiva y sostenible. No debe considerarse como un gasto, sino como una inversión de mejora necesaria a todos los niveles. Es necesario que todas las partes implicadas en la cadena trabajen de forma conjunta para que las medidas de bioseguridad adoptadas sean eficaces.
